Que opino eran una fuente de entretenimiento y diversión para los chavales de mi generación y que ya no los ves hoy día salvo en e-bay o en tiendas físicas que mercadean con la nostalgia a precios de 6 euros o así la pieza (Nada que ver con los precios de aquella época en la que estos sobres eran sin duda unos juguetes de precio popular, al alcance de la paga de los domingos).
Sobre todo molaban los que venían muñequillos,(Yo he sido siempre más de muñecajos, vamos lo que hoy llaman "figuras de acción" ) por que los de construcción de esta casa eran bastante volatiles (me acuerdo de uno que venía un ovni cincuentero y una cápsula espacial que a veces venían mal las piezas de fabrica y montarlos era un autentico coñazo), mi favorito era el de los vikingos o el de los Normandos, aunque los de guerra también como el de la tropa Japonesa de abajo tenían también su aquel.
Algunos de los muñecos vikingos que eran mis favoritos y que no he podido conservar, el de la pata levantada y el que parecía el muñeco de los cigarros celta me encantaban
El ovni de marras que de cuatro intentos construías uno, este le tengo por algún lado de mi casa ya que se lo compre no hace mucho a uno de mis críos, aunque es posible que ya este desaparecido, el sobre incluía una cápsula espacial, una moto, y... otra cosa que no me acuerdo
Este de Japoneses comprado recientemente en otro ataque de locura transitoria si que lo conservo y todos los muñecotes están en ejem.. buenas manos, en poder de mis críos 
10 comentarios:
¡Cómo molaba el de los vikingos! Sin duda mi favorito. Años más tarde descubrí que la amyoría de los soldaditos se podían comprar en las tiendas de maquetas, con mejor acabado (sin las típicas rebabas de plástico) y mucho más caros.
Cierto Pablo en tiendas de maquetas estaban los mismos, pero más currados, se ve que lo de montaplex eran los excendentes medio palla xD, tengo un primo que se hizo entre montaplex y de tiendas de modelismo una increible maqueta de una ciudad romana con coliseo y todo que es espectacular, ademas el tio tenía la paciencia de pintar a mano uno a uno a todos los muñequitos, a ver si algún día le visito y hago fotos por que es la releche
Yo también llegué a comprar el de romanos y pintar algunos. Pero de los buenos. Los de montaplex eran de un plástico peor. Yo no creo que fueran excedentes, sino más bien pirateo puro y duro, usando los buenos como moldes.
Pablo actualizao con un par de imagenes, el Ovni de marras y unos cuantos de aquellos maravillosos vikingos
Joder, si el OVNI está sin desmontar siquiera. Yo debo tenerlos todavía en alguna caja por casa de mi abuela, que era ella quien me compraba los sobrecitos cada fin de semana. Y esos vikingos...
Pues conservalos como oro en paño, que ya te digo valen un riñon y como tampco ocupan demasiado conviene conservarlos aunque sea por rememorar la infancia u otras etapas de la vida al mirarlos de nuevo, yo a mi crio le he comprado para experimentar sus reacciones un par de veces un par de sobres entre ellos el de Japones que ves la imagen o el del Ovni que no se ni donde está, y me dolio en el alma lo que me soplaron(le mola bastante jugar con ellos por cierto)Pensar ademas que tuve en mis manos la mayoría de estos montaplex cuando era un chavalín y que no he logrado conservar de aquellos ninguno me repatea un monton.
O mejor si tienes crios o pretendes tenerlos cedeselos a ellos, que a buen seguro lo disfrutan, lo que hace mucha gente de dejarlos sin montar o metidos en el sobre pa los restos salvo que la intención sea especular en el futuro con ellos y venderlos por que tengas tienda o por lo que sea, me parece con todos los respetos una tonteria.
Hostia, yo recuerdo estas cosas como que venian en sobres y te costaban el doble que un chicle ¿no?
Bueno, de todas formas, yo era un niño amargau que no le molaban los juguetes y estos encima me parecian una cutrez pero su aparicion estelar en Toy Story 1 me hizo mucha ilusion y tu post me ha molao.
Pues ya veré cuando se los cedo, porque por ahora tienen 2 y 4 años y estoy seguro que el pequeño intentaría tragárselos. Por ahora se conforman con los pitufos de su padre y ya le esperan las figuras de Star Wars. Jeje.
¡Ah, el platillo volante... viejo clásico del kiosco, sin ninguna duda el preferido por este anciano, muy por encima de la cápsula espacial!
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