Seguimos con esta serie de aire barriosesamil sobre el contraste de tamaños en los personajes del cómic y la literatura pulp y de otros pelajes
En esta ocasión con un especial manazas, manos amenazantes que irrumpen en la portada para poner en aprietos (Ya saben mano que no aprieta no ahoga) a diminutos seres o a gente normal desde cuya perspectiva visual esas manos no tienen otro calificativo que monstuosas, como la cadavérica mano con Rolex incorporado que vemos en la imagen de arriba.
Hawkman y su novia en apuros, encarcelados, pasados por agua y atosigados por un gigantesco asiduo del florete
Otro personaje pasado por agua y en manos nunca mejor dicho de un aficionado a las probetas
Aquí no es una mano amenazante la que perturba el solazgo de la recauchutada heroína sino¡ Un dedo!
Un cómic de la excelente serie de animación Futurama con un magnifico ejemplo de portada dentro de portada dentro de portada y así hasta el infinito o hasta que la vista alcance
Nada peor que visitar una cueva con la intención de pasar un domingo agradable o posible catre para la novieta/ete de turno y encontrarse con que esta ocupada por un gigante encadenado
Manos que se posan en la concha de la sirena
La pesadilla del oficinista despertarse y aparte de saber que eres el ultimo mono de la oficina ver que el resto de tus compañeros son grandes de manera elocuente, grandilocuentes diría.
Vas a echarte tranquilamente un pitillo en el trastero de luz natural pero sin ventilación, caerse el paquete de tabaco, ir a recojerlo y encontrarte con unos parientes marcianos de las cucarachas con muy malas pulgas y fuertemente armados, bonita forma de dejar de fumar 
Y ya saben amigos, como dice el refrán, a falta de manos un pie que es más sano 
1 comentario:
Las portadas de los comic books de los cincuenta, fuente imagotable de escenas bizarras perfecta y limpiamente plasmadas.
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